Tenerife, la isla más grande del archipiélago canario, se ha convertido en un referente del turismo cannábico en Europa. Con un clima privilegiado y una cultura abierta, la isla alberga más de 50 clubes sociales de cannabis (CSC), especialmente en zonas como Santa Cruz, La Laguna, Arona y Adeje. Uno de ellos es el club Greenfingers, con una tradición de muchos años en la isla y un renombre ganado a pulso por su bien hacer y el trato exquisito con sus socios. 

A diferencia de los coffee shops holandeses, los CSC en Tenerife no están abiertos al público general ni a turistas sin membresía. Greenfingers fomenta la educación sobre el consumo responsable y ofrece una información detallada sobre todo ello en los talleres dedicados al tema en el club, además de asesoramiento personalizado para cada socio. No obstante, es fundamental respetar las normativas locales: el consumo en espacios públicos y la venta no autorizada siguen siendo ilegales. Los clubes operan así bajo estrictas regulaciones para garantizar la legalidad y seguridad de sus actividades. En resumen, Tenerife ofrece un entorno propicio para el amante del cannabis, combinando belleza natural, cultura y una comunidad comprometida con el consumo responsable.