Mientras Mark Carney ganaba apretadamente el puesto de primer ministro en Canadá, fallecía el fundador y creador de la revista Treating Yourself. Hace casi veinte años entrevisté a Marco Renda para la revista Cáñamo. Él ya publicaba la revista Treating Yourself en Toronto, y era uno de los pioneros en el uso medicinal del cannabis en Canadá. Esta publicación comenzó como un chat en línea y siguió creciendo: al principio contaba solo con un logotipo y una portada blanca, sencilla, con muchas páginas de información educativa, y llegó a tener más de doscientas páginas. Su distribución no solo abarcó Canadá, sino también el mundo entero; incluso se tradujo al español y se distribuyó en España. La Treating Yourself Expo (TY Expo) fue la primera feria dedicada al uso medicinal en Canadá, y de ahí también ayudó patrocinando otros eventos como el Festival de Cáñamo de Hamilton Ontario.
Al Graham –colaborador de la revista Treating Yourself– lo describe: “Como paciente, Marco Renda pudo ayudar a otros a nivel local y mundial, ya sea con aceite de cannabis, con la participación en una marcha 420 o con información para educar a su médico a través de la revista. Para él, los pacientes eran lo primero. Pero no se detuvo ahí: creó la primera exposición de cannabis medicinal en Canadá. La TY Expo era un evento que contó con vendedores de todo el mundo, ponentes y seminarios de investigadores destacados. Además, la TY Expo también contaba en su momento con el salón de vapor interior más grande del mundo. No solo fue sorprendente tener una exposición de cannabis medicinal, sino que celebrarla en un edificio federal mientras el cannabis recreativo aún era ilegal fue un gran logro”.
Marco Renda describía su misión en la vida mediante una editorial en la revista: “Nuestro objetivo es brindar a los usuarios de marihuana medicinal información para ayudarlos en su uso de cannabis desde la adquisición de semillas hasta el cultivo de sus propias plantas o la compra de productos de fuentes aprobadas por el gobierno. TreatingYourself.com apoya la eliminación de todas las sanciones por la posesión privada y el uso responsable de marihuana por parte de adultos, incluido el cultivo y las transferencias casuales sin fines de lucro de pequeñas cantidades”.
Desde aquellas veces que platiqué con él a principios de siglo, Renda ya estaba en contra de las farmacéuticas y estaba convencido de la eficacia del cannabis con fines médicos. A él no le importaba vender, sino llegar a los pacientes, ayudar a la gente que realmente lo necesitaba: “Gente ayudando a gente: es un concepto simple. Tras veinticinco años de medicamentos recetados por médicos bien intencionados, y al darnos cuenta de que solo somos peones políticos, decidimos que debíamos empoderarnos; nos correspondía a nosotros, los enfermos y discapacitados de larga duración, tomar las riendas del asunto”, decía Renda.
“Aunque era fácil llegar a los consumidores de cannabis, Renda quería llegar a los no consumidores, por lo que hizo que TY participara en ferias como Canada Blooms, The International Women’s Show y muchas otras. Una vez me dijo que quería participar en todas las grandes ferias del centro y creo que lo hizo”, explica Graham.
Marco Renda también formó una cooperativa, People Helping People, una organización que ayuda a los enfermos, sobre todo a los que padecen dolores crónicos fuertes: “Todos queremos hacer esto con honestidad –refirió Renda acerca de la cooperativa–. Hemos formado una cooperativa que crece día a día. Lo hacemos porque nos importa. Tenemos cultivadores en todo el país que disfrutan de la idea de que su planta, cultivada con cariño, sea utilizada por personas de todo el mundo. Esta es una medicina que marca una verdadera diferencia en la vida de las personas. Creemos que la ingestión es la mejor manera de usar la medicina”, concluyó.
Marco Renda padecía hepatitis C y fue de los primeros pacientes en tener un permiso para utilizar el cannabis medicinal. Parece que al final fue el cáncer el que se lo llevó. Aunque el cannabis ya sea legal en Canadá y tengan los programas de cannabis medicinal, aún falta mucha educación e información acerca de la planta y mucho por hacer para que sea accesible a toda la población y no se encarezca de precio y baje su calidad como tiende a hacer el capitalismo. Sin embargo, si vemos la evolución de la situación cannábica cuando Marco Renda empezó su activismo y lo comparamos con la actualidad, podemos observar como se ha avanzado y agradecer a activistas y luchadores sociales como él su dedicación, sobre todo ayudando al prójimo. Descansa en lucha, Marco Renda.